sábado, 1 de septiembre de 2012

La cultura en internet y un cojón

¿Cuántas veces hemos utilizado (mi menda incluido, que aquí el que esté libre de culpa que tire la primera piedra, y si va y le da en la boca a la Sinde se gana mi cariño ad eternum) el argumento de que las descargas gratuitas promocionan la cultura? ¿El argumento de que las descargas libres y la libre compartición interneril son buenas para la cultura, haciendo que ésta llegue a todo el mundo sin atender a su nivel adquisitivo? (Aunque, de facto, presupongamos un nivel adquisitivo que permite al interpelado tener ordenador y pagar su correspondiente cuota adeseleril, vamos, que no estamos hablando precisamente de pobres de solemnidad).  En fin, que sí, que está muy bien decir todo eso y blablablá, pero en la vida real, cuando quieres ver alguna peli de Aki Käurismaki, cuando buscas alguna frikada level Jesucristo Cazavampiros o Cartas de un hombre muerto; cuando intentas buscar la sinfonía número 2 de Balakírev o bajarte alguna partitura de alguna canción poco conocida para el piano, encomiéndate a Dios si eres cristiano, al Diablo si eres satánico o a la puta madre que los parió a todos si, como yo, eres un ateo recalcitrante pro abortista devora fetos. Pero el caso es que pa encontrar algo lo llevas jodido, colega.

No obstante, busca uno cualquier basura infecta del Bosé, Pitbull, Justin Bieber, etc... o cualquier peli de estas mierder de superhéroes mierder o rollos amor moñas mierder o rollos Chuck Norris mierder y le salen resultados a patadas (giratorias).

Entonces yo me pregunto: ¿promociona realmente internet la cultura? O no será más bien que, como siempre, aquí no promociona la cultura ni su padre y el 99,infinitos nueves% del contenido supuestamente cultural de internet no difiere en absoluto del consumo cotidiano de eso que se tiene a bien llamar masa borrega.

Que sí, que es cierto, que internet ha descubierto mucho a mucha gente, a mí incluido, pero, como siempre, eso es sólo a la gente que busca que le descubran y esa gente, ay queridos amigos, no abunda precisamente. En la red, como en todas partes, abunda la cacota. Así que cuando pienso en eso de la cultura e internet, ahora, más que un argumento me parece un chiste. Eso sí, sigue sin hacerme ni puta gracia no encontrar las sinfonías de Balakírev, por poner un ejemplo que no tiene que ver con esta entrada y que para nada ha sido el motivo de que se me haya ocurrido la misma.

Pero no desisto, y seguiré en mi búsqueda, aunque para ello me deje el dinero que no tengo en anti-viracas. A fin de cuentas, al final, por jodido que nos lo pongan, resulta que casi es más difícil conseguir una peli de Käurismaki o una sinfonía de Borodin en cualquier tienda física que gratis en internet. Eso sí, el mundo que ha abierto la red para la compra on-line debe ser bastante lucrativo... que ahí sí que tienes hasta el corto que hizo Buñuel sobre el grano del culo de Gala la mujer de Dalí y que ni siquiera existe. (Te estafaron de nuevo, tontaina). Así es internet y la maravillosa cultura que promueve.

Sube la mano y grita gol, gol, gol, uhooo, uhoooo, sube la mano y descárgate totalmente gratis gol gol gol. Pedazo de subnormal.

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